Tarea Política
- José Luís Santana Ochoa
- 28 jul 2018
- 3 Min. de lectura

JUNTOS PERO NO REVUELTOS
De las 15 diputaciones locales de mayoría relativa y una de representación popular que la coalición “Juntos Haremos Historia” cosechó en las urnas el domingo 01/07/2018, siete corresponden al Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), cinco al Partido del Trabajo (PT) y cuatro al difunto Partido Encuentro Social (PES), pero quieren hacerse también de la segunda plurinominal que le fue asignada al panista líder invicto en contiendas electorales plurinominales, Fernando Antero Valle, y la tercera a la priista María Guadalupe Berber Corona. Habrá que esperar para ver si los tribunales electorales les cumplen el antojo.
De entrada, ha iniciado ya la etapa de diferenciación por siglas y colores partidistas donde cada subgrupo parlamentario amloísta velará por sus proyectos políticos de cara al 2021. Habrá que ver cómo se redefinirán los cuatro diputados que se han quedado huérfanos de partido por haber perdido el registro local al no alcanzar el porcentaje de votación mínimo requerido. Es probable que se declaren independientes sabedores de que valdrán más como fieles de la balanzas a la hora de las consabidas negociaciones con el Ejecutivo Estatal.
El primer agarrón que se darán morenistas, petistas y ex pesistas será por el reparto de los órganos de gobierno interno del Congreso del Estado y el reparto de comisiones, mismos que para bien de Colima ojalá recaigan en quienes acrediten los mejores perfiles como la ciudadanía lo demanda y merece, o al menos en quienes sepan leer y escribir. Todavía no toman posesión de sus curules y ya empezó a cundir la desconfianza por los coqueteos de dos o tres de ellos con el peor gobernador de la historia de Colima. Si no se ponen serios todos para cerrar filas en torno a sus camaradas que sí le entiendan al tema, más pronto que inmediatamente terminarán enredados.
Integran la fracción morenista de “Juntos Haremos Historia”, Claudia Gabriela Aguirre Luna (DI), Miguel Ángel Sánchez Verduzco (DII), Araceli García Muro (DIV), Alma Lizeth Anaya Mejía (DIX), Julio Anguiano Urbina (DXI), Luis Rogelio Salinas Sánchez (DXIV) y Livier Rodríguez Osorio (PLURI). En una primera aproximación se ve que en este grupo destaca por su trayectoria política Julio Anguiano Urbina, quien tiene en su historial público el haberse desempeñado como dirigente de la CNOP, presidente del PRI y regidor en el municipio de Tecomán.
Llevan las siglas y colores del Partido del Trabajo tatuados en pecho y espalda, Carlos César Farías Ramos (DIII), Jazmín García Ramírez (DV), Guillermo Toscano Reyes (DVII), Ana Karen Hernández Aceves (DXI) y Arturo García Arias (DXV). Este último ya cobró dos trienios en el Congreso del Estado a donde llegó con el patrocinio del Partido Revolucionario Institucional del que renegó a cambio de una tercera candidatura abanderado por el PT. El abogado litigante y ex funcionario federal, Carlos César Farías Ramos, por haberse incorporado al proyecto presidencial 2018/2024 de AMLO desde sus primeras etapas en Colima, su perfil profesional, campaña realizada, liderazgo que empieza a ejercer al interior de su bancada y relaciones constructivas que ha establecido con su propia fracción petista, la de MORENA y los pollos pepes del extinto PES, llamado está a desempeñar un rol protagonista en la próxima LIX Legislatura Estatal.
Conforman el grupo legislativo del desaparecido Partido Encuentro Social, Vladimir Parra Barragán (VIII), Ana María Sánchez Landa (XII), Luis Fernando Escamilla Velazco (XIII) y Anel Bueno Sánchez (XVI). Aquí saldrán chispas entre el villano Vladimir y el porteño Luis Fernando. La ixtlahuaquense Francis Anel, quien tuvo una corta temporada en la anterior LVII Legislatura, tendrá la tarea de atemperar las ansias de novilleros de sus muy acelerados compas.
EL ACABO
Por lo mucho que está en juego, dura será la disputa entre los diputados locales integrantes hasta ahora de la coalición “Juntos Haremos Historia”. Para todos habrá si no arrebatan.
Que nadie se asuste ni se espante de la rebatiña que viene en camino entre los todavía hermanados legisladores morenos, trabajadores y ex pesistas.
Los de la chiquillada quedarán como el perro del carnicero. Días de unos, vísperas de otros.
Tiene razón el tercer Secretario de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado, Miguel Becerra Hernández, cuando afirma que no se puede solucionar el abasto de medicamentos para los hospitales y centros de salud a cargo de esa Dependencia “de golpe y porrazo”. La pésima administración de José Ignacio apenas lleva tres años, hay que tenerles paciencia, a lo mejor para el 2020/2021 logran resolver el problema.