Al Robot: ¿Cómo aprovechar la enseñanza en línea?
Por: Edgar Tercero
¿Cómo aprovechar la enseñanza en línea?
Los profesores se quejan hoy en día porque los papas terminan enseñando de otra forma y los niños no hacen caso a sus métodos.
¿Debe evaluarse al estudiante por un método de enseñanza en particular? ¿No debería ser la época en la que se motive al estudiante a encontrar las respuestas por ellos mismos?
Los profesores son una guía, que permite enseñar una forma de como entender las materias que dan, pero cada ser humano tiene una forma diferente de aprender, ya sea oyendo, viendo o de manera kinestésica, sin embargo, seguimos limitando a nuestros estudiantes forzándolos a aprender una única forma de resolver problemas.
Y esto no se debe a la llegada de internet, en el pasado uno podía leer varios libros de diferentes autores encontrando métodos diferentes pero que concluyen el mismo resultado. También se podía tener diferentes puntos de vista y así uno decidir por cual irse para aplicarlo.
El hecho de tener un profesor en frente del salón no significa que debamos limitarnos a lo que se da en clase, el buen estudiante, por llamarlo de alguna manera, es aquel que con esa curiosidad que tenemos los humanos se ponía a investigar, sacaba sus propias hipótesis, llegando posteriormente con el maestro para aclarar los huecos.
Ahora consideremos que la biblioteca ya no es un lugar que se encuentre abierto en un horario en particular, gracias al internet se puede encontrar información las 24 horas, es aquí donde los profesores se convierten en guías para los estudiantes, porque son ellos quien pueden recomendar o refutar los sitios que contienen información. Pero dejar que los alumnos experimenten, deduzcan y aprendan a investigar.
Hoy considero que es mucho más sencillo escoger lo que más nos apasiona, porque la educación en línea, la verdadera educación en línea ha venido a revolucionarlo todo, los profesores son conscientes que un curso de 30 horas es una gran aproximación, pero la información debe ser completada con investigación del propio estudiante. Sin embargo, traemos la vieja escuela de que solo nos quedábamos con lo que decía el profesor en clase. Pocos eran los estudiantes que se acercaban a los profesores para pedir asesoría después de haber intentado un camino y otro sin llegar a una conclusión satisfactoria.
Hace tiempo leía un libro donde daba su testimonio el fundador de Honda, Soichiro Honda. Hagamos un poco de historia, en un inicio su compañía hacia motos, muy buenas motos, pero no sabían hacer carros, por lo que tenían un gran problema con los pistones, los cuales eran muy rígidos por lo que se rompían constantemente. El Sr. Honda decidió entrar a la universidad porque dentro del plan de estudios descubrió que contaban con la materia donde explicaban como crear los pistones para carros. Una vez aprendido lo que se requería el decide que ya no quiere seguir en la universidad, por lo que el director muy enojado lo reprendió por no querer estudiar las demás materias, era una deshonra para la universidad. El Sr. Honda no se incomodó porque aprendió lo que requería para poder mejorar sus vehículos, llevarlo a la práctica y hoy tener una compañía internacional como lo es Honda.
De la misma forma tenemos otro ejemplo destacable, el legendario Steve Jobs, quien fue a la universidad, pero que la materia que más le llamo la atención fue una de tipografía, y ese conocimiento marco la pauta para que hoy tengamos en las computadoras y dispositivos electrónicos, los diferentes tipos de letras. Él sostenía que muchas veces no sabemos en que nos va a beneficiar el conocimiento adquirido en el momento, pero pasados unos años podíamos voltear hacia atrás y darnos cuenta de que eso fue lo que nos puso donde estamos hoy.
Ambos ejemplos me gusta utilizarlos porque nos dan un panorama del estudio en línea, donde podemos enfocarnos en aprender una habilidad a la vez, no necesitamos meterle más paja al cerebro para cumplir con un plan de estudios, es un hecho que al momento de trabajar no utilizamos de todo lo que aprendemos en la universidad, si pudiéramos enfocarnos en eso que nos apasiona o nos servirá para alcanzar nuestros objetivos podríamos invertir más tiempo en cosas que produzcan valor.
Desde mi punto de vista el objetivo debería ser aprender, aplicar ese conocimiento, avanzar. No cumplir con varias materias, sacar un promedio y que me den un título. De qué sirve traer el título de abogado si voy a terminar manejando un carro. Conozco psicólogas que se dedican a dar masajes o ser estilistas porque les deja más de lo que podría darles lo que estudiaron durante tantos años.
Uno de mis grandes mantras ha sido ir aprendiendo lo que requiero para salir adelante, estudie ingeniería electrónica, la realidad es que no la ejercí al 100%, termine en un área ajena a la electrónica que me involucraba más con el negocio de las empresas para las que daba consultoría, lo que me permitía aprender nuevas cosas, que me gustaban y no se asemejaba con lo estudiado en la universidad. Termine en áreas de preventa, llegando al punto de administrar y dirigir proyectos de tecnología, claro que mi historial como desarrollador y consultor me ha ayudado mucho para entender este tipo de proyectos, así como conocer los problemas comunes con los que se enfrenta el área de tecnología en los proyectos.
Esto me dejo claro a mí que siempre puedo aprender nuevas cosas, pero no requiero de un mundo de materias para entenderlo, basta con enfocarme en el área de estudio elegida, lo que me permite disminuir mi campo de estudio, delimitarlo y encontrar al maestro adecuado que me sirva de guía, además que los proyectos en sí dan un cúmulo de conocimiento indispensable, porque el conocimiento sin práctica se vuelve tiempo perdido, hay que aplicar lo aprendido, de otra forma se olvida y se vuelve un peso en nuestros cerebros.
Profesionalmente me he encontrado con personas que se apagan tanto al método que se vuelven poco flexibles, haciendo los procesos burocráticos, pensando solo en como negociar el contrato para cobrar más o simplemente no rebasar lo contratado. Agarran las guías como si fuera una obligación seguirlo al pie de la letra aún y cuando algo no aplique para el proyecto que se este llevando, cuando las guías son eso, una forma de apoyo para lograr el objetivo, pero no se aplican al 100%, por eso traen dentro de sus páginas donde no aseguran el éxito del proyecto. Es allí donde entra nuestro razonamiento, la capacidad de análisis y el liderazgo que son habilidades blandas con las que contamos los seres humanos, las desarrollamos con los retos a los que nos enfrentamos, pero no se forman por seguir una guía en particular.
En el área del desarrollo de software nació una guía llamada ágil que está rompiendo paradigmas, utilizado en tecnologías disruptivas actualmente. El enfoque es entregar valor, entendiendo por entregar valor, el que los clientes tengan un producto que puedan utilizar, no esperarse 8 meses para ver el producto final el cual no cumple al cien por ciento sus expectativas. Se centra más en las personas, entregar algo funcionando y no negociar los alcances, penalizaciones o simplemente entregar documentación sin contar con un producto en forma.
Por esa misma razón el profesor considero que los profesores deben centrarse en el aprendizaje del estudiante, si al final llegan al mismo resultado no importa el método que utilicen, si al final es incorrecto lo que resulta, el profesor debe ser guía y aportar con referencias donde está el error, así como mostrarle el camino al estudiante. No es llenarles la cabeza con fórmulas, puesto que hoy en día cualquier cosa que quieran saber se lo preguntarán a Google, sin la guía adecuada pues podrían encontrarse con basura informática.
Llego el momento de que los profesores evolucionen, podamos dar respuestas con argumentos sin imponer su autoridad, en esta época donde la educación a distancia va en aumento, debe capacitarse tanto alumnos como profesores. En mi experiencia me he encontrado con profesores en línea apasionados, profesionistas que les encanta enseñar, y creo que para ser profesor se requiere vocación, así como ganas de transmitir el conocimiento para beneficio de todos.
Dejemos la rigidez para llevar a cabo los proyectos del día a día con los trabajos, adoptemos nuevas fuentes de pensamiento, sigamos aprendiendo, que esta carrera es larga, quizá descubramos que existe algo más que nos apasiona y podamos cambiar de destino conforme avanzamos de tal forma que descubramos aquello que más nos gusta, aplicando así valor a nuestras vidas y de los que nos rodean.
Hoy puedo ver gente mayor aprendiendo a cocinar nuevas recetas viendo vídeos en youtube, reparar tu impresora vieja siguiendo algún canal de tecnología, sacarles el mayor provecho a nuestros dispositivos viendo como lo hacen los profesionales, aprender un idioma en línea ahora permite conversar con personas de otros países acercándonos más a la lengua de origen. Hay personas que han aprendido a programar con un curso en línea, aprender a dibujar, tocar la guitarra, aprender ecuaciones diferenciales, etc. Un mundo se abre para el aprendizaje, así como la posibilidad de extender el brazo y apoyo por parte de los profesores del hoy.
Ahora se presenta la oportunidad de darle un objetivo al estudio, así como el Sr. Soichiro Honda aprendió con una materia como hacer los pistones que requería para sus vehículos, así nosotros podemos enfocar el estudio en aquello que nos agrada para seguir ese camino volviéndonos los mejores en esa área.
“Aprendamos a generar valor”
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