Diurnarius: "Serenos Morenos"

Por Miguel Ángel Sánchez Romero.

"Serenos Morenos"

No confundan la traición a la patria, con la incapacidad de los legisladores de Morena para debatir y consensuar con la oposición.

Si hay alguien a quien tienen que reclamar, es a sus diputados y diputadas, porque fueron ellos los que le fallaron al Presidente, fueron ellos los que perdieron el debate, fueron ellos los que no supieron construir acuerdos para sacar adelante el encargo que les confió AMLO, fueron ellos los que defraudaron a su líder y a sus seguidores.

No culpen a la oposición, el PRI, PAN, PRD y MC hicieron su trabajo y lo hicieron bien, a pesar de la campaña de odio y desprestigio en su contra, no los doblaron ni los quebraron, siguieron defendiendo su postura y a sus representados, y a todos aquellos que no están de acuerdo con la política del Presidente, ellos sí hicieron su trabajo.

Lo que sí es traición a la patria, es polarizar al país, sembrar el odio y alimentar el rencor entre los mexicanos. No se vale utilizar a los más necesitados y sectores vulnerables como ejército de venganza o para alimentar egos faraónicos, la lucha tiene que ser por un México más justo y próspero para todos, pero nunca, nunca para dividir al país entre pobres y ricos.

No se equivoquen señores y señoras de Morena, los enemigos del Presidente no son los neoliberales ni los conservadores, ni los priista, panistas, perredistas o MC, ni mucho menos los periodistas y comunicadores. Los verdaderos enemigos de AMLO son los pseudoMorenistas que llegaron a dinamitar desde sus entrañas al Movimiento de Regeneración Nacional, basta con ver algunos de sus gobiernos locales para darse cuenta que están plagados de corrupción y opacidad, contradiciendo una y otra vez los principios de moralidad del Presidente de no mentir, no robar y no traicionar.

Ellos, los pseudoMorenistas son los verdaderos enemigos del Presidente y de la Cuarta Transformación. No se equivoquen, si quieren buscar culpables de la derrota que tuvo el Presidente el pasado domingo en el Congreso de la Unión, vayan a un comité estatal de Morena o llamen a las puertas de una casa de gobierno estatal y seguro los encontrarán.

Sin duda alguna, lo rescatable de la sesión del pasado domingo, no fue el resultado de la votación, lo transcendente fue que el Poder Legislativo recuperó su autonomía e hizo valer la división de poderes y le recordó a ya saben quién que la Ley sí es la Ley, que el pueblo no es él, que la verdad absoluta no sale de su boca, pero sobre todo que dentro de su partido no son iguales sino peores a los que tanto critican y que el domingo pasado, aunque parezca irónico, les dieron una cátedra de lealtad, unidad y principios.